arrow-circle arrow-down-basicarrow-down arrow-left-small arrow-left arrow-right-small arrow-right arrow-up arrow closefacebooklinkedinsearch twittervideo-icon

Taller inaugural del Centro Regional MENA

Fecha de publicación:
28/04/2023
Tipo de contenido:
Comparte:

— 3 minutos tiempo de lectura

En marzo, el Centro Regional MENA de la Red de Ciudades Fuertes celebró su taller inaugural en Rabat, Marruecos, con el generoso apoyo de la Unión Europea (UE). El taller, coorganizado por la ciudad de Rabat, reunió a más de 70 representantes de gobiernos locales, gobiernos nacionales y sociedad civil de Egipto, Irak, Jordania, Líbano, Libia, Marruecos y Túnez, así como de las Naciones Unidas (Ej. ONU-Hábitat, la Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo (UNOCT) y la Oficina contra la Droga y el Delito (UNODC), Ciudades y Gobiernos Locales Unidos de África (UCLGA) y otros socios internacionales. Entre ellos había alcaldes, tenientes de alcalde y otros funcionarios de la administración local de 27 municipios o gobernaciones de toda la región MENA.

El taller sirvió como introducción al Centro Regional MENA y a su cinco pilarese invitó a los participantes a intercambiar perspectivas sobre las amenazas a las que se enfrentan las ciudades de toda la región y las necesidades y prioridades de los gobiernos locales para reforzar su papel en la prevención y respuesta al extremismo, el odio y la polarización como parte de un enfoque de toda la sociedad para hacer frente a estos retos.

Los participantes identificaron varios retos y amenazas que obstaculizan el crecimiento económico y la estabilidad social en la región de Oriente Medio y Norte de África, como los conflictos violentos en curso, las elevadas tasas de desempleo entre los jóvenes, las violaciones de los derechos humanos -a menudo cometidas en nombre de la lucha contra el terrorismo- y la inseguridad alimentaria y de la tierra, todo lo cual es aprovechado por los grupos extremistas para reclutar adeptos. Estos retos están causados y agravados por los desplazamientos masivos y las migraciones, que provocan fluctuaciones demográficas a las que los gobiernos locales no están preparados ni apoyados para responder. Esto contribuye a la tensión entre los recién llegados y los residentes de larga data (por ejemplo, debido a un mercado laboral más competitivo o a una mayor demanda de servicios públicos limitados), creando condiciones propicias para el odio, la polarización y el extremismo.

Los continuos retos que plantea la repatriación de los combatientes terroristas extranjeros (FTF) y sus familias, cuyos procesos son actualmente insuficientes o inexistentes, especialmente a nivel local, complican aún más la situación. Los participantes de Irak comentaron en particular la carga añadida (sobre los recursos de la región) de los FTF y las familias de fuera de la región, en particular de Europa, así como de otros desplazados por la violencia relacionada con el Estado Islámico, que permanecen en campamentos en el país y en el noreste de Siria, a pesar de la presión internacional sobre los países de origen para que repatríen a sus ciudadanos. La urgencia y la magnitud de la situación se ven agravadas por las terribles condiciones de vida en los campos. En relación con esto, algunos participantes comentaron los retos que plantea la gestión de la reinserción de personas excarceladas en sentido más amplio.

Los participantes señalaron que foros como éste, en el que las ciudades se reúnen para compartir prácticas, son un paso importante para aprender cómo sus homólogos de otros contextos han abordado estos retos y han perseguido y sostenido un papel para su ciudad en la prevención. En este contexto, los participantes también acogieron con satisfacción el anuncio de dos guías de Ciudades Fuertes -una para alcaldes y otra para profesionales de los gobiernos locales- que proporcionarán una serie de medidas prácticas que las ciudades pueden adoptar para mejorar y mantener su papel en la prevención.